Dr. Eduardo Ramirez
Emergencia Obstetricas
Ruptura Uterina
Definición
Es la presencia de cualquier desgarro del útero, no se consideran como tales la perforación
translegrado, la ruptura por embarazo intersticial o la prolongación de la incisión en el momento de la
operación cesárea.
La ruptura uterina, es la complicación, más grave de una prueba de trabajo de parto o después de una
cesárea. Se define como la completa separación del miometrio con o sin expulsión de las partes
fetales en la cavidad uterina peritoneal y requiere de una cesárea de emergencia o de una
lapatotomía. Sin embargo es una complicación rara después de un parto, o después de una cesárea
previa pero es asociada al aumento de la mortalidad y morbilidades maternas y perinatales. El signo
más común asociado en la ruptura uterina son las alteraciones de la frecuencia cardiaca fetal.
Factores de riesgo
Se considera una mujer embarazada con mayor riesgo para presentar una ruptura uterina cuando existe:
Cirugía uterina previa
Miomectomía
Cesárea Anterior
Plastía úterina
Periodo intergenésico de 18-24 meses de una cesárea anterior
Ruptura uterina previa
Cesárea corporal o segmento corporal
Uso de prostaglandina E2 (dinoprostona) con cesárea previa
Uso de prostaglandina EI (misoprostol) con cesárea previa
Tener más de una cesárea
Diagnóstico
No existe signo patognomónico que sea indicativo de ruptura uterina pero la presencia durante el parto de
algunos de los siguientes datos debe de poner alerta por la posibilidad de éste evento:
Registro cardiotocográfico anormal
Dolor abdominal severo, especialmente si persiste entre contracciones.
Dolor en el pecho o en el hombro y repentina perdida del aliento
Dolor repentino en la cicatriz
Sangrado transvaginal anormal o hematuria
Cese de la actividad uterina previamente eficiente
Taquicardia materna, hipotensión o choque.
Pérdida de la estación de la presentación.
El diagnóstico se confirma con una cesárea de emergencia o laparotomía posparto
Importante
Un registro cardiotocográfico anormal (RCTG) es el hallazgo más consistente en la ruptura uterina y esta
presente en 55 87% de estos acontecimientos.
Tratamiento
El tratamiento ante la sospecha de ruptura uterina es la laparotomía exploradora oportuna, la cual se realizará
después de estabilización y anestesia maternales.
Una vez que el feto es entregado al pediatra, la hemorragia materna debe controlarse, y si el útero no puede
conservarse, la histerectomía puede ser requerida.
Seguimiento
El enfoque a hemorragia postparto incoercible será individualizado dependiendo de la situación clínica y las
habilidades quirúrgicas y la tecnología disponibles.
Continuar con la vigilancia y reposición de líquidos y reemplazo de componente de sangre y el uso de toda
la pericia disponible son esenciales.